No hay verano sin sus chuletas de calabacín, calabacín rebozado, lengüetas, o como lo llaméis en cada casa.
En este caso le añadí una salsa de queso super fácil que podéis hacer para mil recetas más, como pasta, ensaladas, otras verduras..
Pero con el calabacín combina tan bien, y es que el calabacín está muy rico y es muy nutritivo, es 95% agua, perfecto para dietas de adelgazamiento (siempre que no se haga rebozado claro)
Es una buena fuente de potasio, magnesio, fósforo y fibra, que mejora el aspecto de nuestra piel y nuestra salud cerebral.
Y como curiosidad que sepáis que es rico en luteina que ayuda a la salud de nuestros ojos.
Ingredientes:
1 calabacín
Sal
Harina
2 huevos
100grm de queso para untar
Tomillo
Romero
Aceite de oliva
Cortamos el calabacín en lonchas, le ponemos un poco de sal y lo dejamos un par de horas que suelte el agua
A continuación ponemos sobre papel absorbente, pasamos por harina y huevo y freímos
Para la salsa mezclamos el queso con un pelín de agua para que sea más líquido y añadimos romero, tomillo y una pizca de sal
Servimos el calabacín con la salsa
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